XI
Congreso de Historia de Colombia
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PONENCIAS (texto
completo)
Las comunidades de
religiosos en Antioquia, 1885 - 1950 Juan
Felipe Córdoba Restrepo
Introducción
Este
busca texto presenta una descripción general sobre las comunidades religiosas
masculinas en Antioquia durante 1885-1950, mostraré su origen, el
establecimiento en Antioquia, que actividades desarrollaron, y destacaré por
su importancia tres comunidades: en el campo de la educación a los Hermanos
Cristianos y en el de las misiones a los Carmelitas Descalzos y a los Padres
Javieres.
Origen
La
vida en comunidad se inicia desde los primeros años del cristianismo. A lo
largo de la Edad Media aparecen tres figuras que definen la vida monacal,
existen otros, pero en definitiva estos son los más sobresalientes por la
importancia de las reformas que desarrollaron: San Benito de Nursia (fundador
de los Benedictinos, siglos V-VI), impuso a los monjes pobreza, obediencia,
castidad y permanencia en los monasterios, presididos por un abad y asistido
por un prior., San Agustín (fundador de los Agustinos, siglo IV y V) cuyas
reglas consistían en consagrar la vida a la plegaria, a el estudio, a la
penitencia y a las buenas obras. Y mucho más tarde San Bernardo de Claraval
(reformador del comunidad del Císter, siglo XII, fue el que convocó a las
Cruzadas).
Sin
embargo, las comunidades religiosas continuaron desarrollándose, en el en el
Concilio de Letrán (1215) el papa Inocencio III, para revitalizar la Iglesia
y llevarla a estar más acorde con su época, presentó el siguiente programa:
"Eliminar la herejía y fortalecer la fe - pero también reformar las
costumbres, extirpar los vicios, implantar las virtudes, conjurar los excesos.
Y aún más, calmar las discordias, establecer la paz, repudiar la tiranía y
hacer prevalecer la verdad por todas partes".
Bajo
este ambiente de comienzos del siglo XIII, se ven aparecer nuevas ordenes
religiosas que se apartan de la forma de vida de las viejas comunidades
monacales, las nuevas congregaciones pero tampoco pretendían estar ya en las
guerras en defensa de la fe (las cruzadas, por ejemplo los Templarios)
esperaban vivir una vida religiosa que se inspirara en el amor a Dios y los
hombres e imitar a Jesús en su preocupación por los pobres, surgen entonces
la orden del Espíritu Santo (para curar enfermos) y la orden de los
trinitarios (para rescatar cautivos). Pero son dos personajes los encargados
de establecer el nuevo orden de las comunidades San Francisco de Asís y Santo
Domingo de Guzmán.
Este
último, pensaba que el clero de su época carecía de moral y era demasiado
rico, propuso en el mismo Concilio de Letrán constituir una nueva congregación
donde la principal regla fue la de la pobreza (extraída de la regla
agustiniana). Otro punto consignado en las constituciones de la Orden de
Predicadores (1215), nombre dando a la nueva congregación, fue la del rechazo
a la propiedad y a las rentas.
Pero
la vida en comunidad también se reforma, ya no sólo cantan coros de alabanza
todas las horas, como los Benedictinos, los oficios litúrgicos se suavizan, y
dedican parte de su tiempo a predicar a las masas urbanas, los conventos domínicos
se instalan en el seno de las nuevas ciudades.
La
Comunidad de Frailes Menores, por otro lado, fundada por San Francisco de Asís
en 1209, se diferencia de la de Santo Domingo, pues no debe su surgimiento a
los clérigos mismos, es una forma de vivir el evangelio de origen laico;
Francisco era cortesano, cuando sintió el llamado de Dios renunció a su
propiedades y se consagro a la penitencia, pero al tiempo cantaba a la belleza
de la naturaleza, varios amigos suyos le siguieron y con las manos vacías y
un hábito vivían entre los pobres, trabajaban con ellos y por la noche
alababan la creación. Según Georges Duby Francisco no luchaba con la espada
ni con la razón contra la herejía, sino que lo realizaba con el impulso de
su corazón y su forma de vida, además considera que con Cristo, es un héroe
de la historia Cristiana, y afirma "que lo que el cristianismo de hoy
conserva vivo aún procede directamente de él."
El cristianismo que promulgaba San Francisco propone, pues, una
reconciliación con la creación, proclama la bondad y la belleza de Dios en
la bondad de sus criaturas. A mediados del siglo XVI surgen las órdenes de clérigos
regulares comunidades que realizaban funciones iguales a las del clero
secular, pero adicionalmente hacían votos, al igual que las órdenes
religiosas. Un ejemplo del clero regular es la Compañía de Jesús, fundada
en España por San Ignacio de Loyola, en 1540, y la de Carmelitas Descalzos,
por Santa Teresa de Jesús en 1568, también fundada en España.
Un
siglo más tarde apareció otra modalidad de asociación religiosas las
congregaciones de votos simples. Una de ellas fue el Instituto de las Escuelas
de los Hermanos Cristianos, creada en 1680 en Francia por San Juan Bautista de
la Salle.
Cada
comunidad religiosa tiene su propio carisma, don ó rasgo que define un estilo
propio de trabajo en la sociedad, el cual, se creía, procedía del Espíritu
Santo y se expresaba a través de los fundadores.
Algunas comunidades se dedicaron a la oración; otras, además de orar,
impartieron educación y asistieron a los enfermos. Varias
conjugaron diferentes labores.
De
las comunidades que llegan a Antioquia, la más antigua es la Orden de Fraile
Menores (más conocidos como Franciscanos) esta comunidad aparece en el siglo
XIII. Desde mediados del siglo del siglo XVI y en el transcurso del siglo XVII
surgen un buen número de comunidades, recuérdese que se esta celebrando el
Concilio de Trento, aquí están: los Jesuitas, los Carmelitas Descalzos, los
Escolapios, los Agustinos Recoletos, los Eudistas, Hermanos Cristianos. De las
comunidades fundadas en Europa a lo largo del siglo XVIII, ninguna llega a
Colombia durante el período propuesto. Hacia finales del siglo XIX, aparecen:
Claretianos, Terciarios Capuchinos, Salesianos y Salvatorianos, y en el siglo
XX se ve surgir la última los Padres Javieres, que es de origen local.(Tabla
I)
Los
franciscanos pertenecen a una orden mendicante. Los jesuitas, los carmelitas,
los Agustinos recoletos y los escolapios son órdenes de clérigos regulares.
Los eudistas, los hermanos cristianos, los salesianos, los claretianos, los
padres javieres, los salvatorianos y los terciarios capuchinos son
considerados congregaciones o institutos.
Establecimiento
en Antioquia
En
Antioquia durante el período colonial sólo se asientan tres comunidades: los
Jesuitas que fundan un colegio en Santa Fe de Antioquia en 1726 y permanecen
hasta 1767 cuando son expulsados por Carlos III de todos sus dominios, los
Franciscanos estuvieron en Santa Fe de Antioquia durante la segunda mitad del
siglo XVII y en Medellín en 1803 donde fundan el Real Colegio de Franciscanos
(para algunos la génesis de la Universidad de Antioquia) y los Hermanos
Hospitalarios donde llegan a dirigir el Hospital de San Juan de Dios en 1802.
En la primera mitad del siglo XIX, prácticamente todas las comunidades
abandonan el territorio antioqueño, diferentes leyes de la República en
contra de ellas, hicieron que estas congregaciones no permanecieran en la región.
Sólo ingresan los Jesuitas en 1845 a dirigir el colegio académico, en 1842
habían regresado a Colombia, para ser expulsados de nuevo en 1850 por el
gobierno de José Hilario López. Por último, en 1858 el presidente
conservador Mariano Ospina Rodríguez los invitó a establecerse de nuevo en
el país, pero, en 1861, al ser derrocado Ospina, el general Liberal Tomás
Cipriano de Mosquera los volvió a expulsar.
Durante
la Colonia en otras regiones del país, como Bogotá, Cartagena o Popayán,
las comunidades religiosas masculinas tuvieron mayor influencia que en
Antioquia, pero durante el los primeros años de la República sufrieron los
mismos vaivenes que en Antioquia. Sólo dos congregaciones permanecieron en el
país, los Filipenses que se radicaron en Pasto en 1830, y los padres
Lazaristas instalados en Popayán en 1870.
Pero
es durante el último cuarto del siglo XIX cuando empieza llegar un mayor número
al país, en este período llegaron 10 comunidades, en la primera década del
siglo sólo llegan 2, para la segunda arriban 4, en los años veinte llegan 5,
durante la década del 30 no llega ninguna y por último en la década del 40
arriban 5. Este es el panorama del ingreso de las veintiocho comunidades que
ingresan al país entre 1885 y 1950. En el caso de Antioquia durante el período
se establecen 12 de estas comunidades, en el último cuarto del siglo llegan
5, mientras que entre 1910 y 1930 sólo llegan 4, para la última década de
este estudio ingresan 3 al territorio antioqueño.
De
este conjunto de comunidades once proceden de Europa y una de origen local.
Las españolas son: la Compañía de Jesús, la Orden de los Carmelitas
Descalzos, la Congregación de Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María,
la Orden de los Recoletos de San Agustín, y el Instituto de Religiosos
Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los Dolores; de Francia la
Congregación de Jesús y María o Padres Eudistas y el Instituto de los
Hermanos de las Escuelas Cristiana; de Italia la Orden de Frailes Menores,
Sociedad de San Francisco de Sales, la Orden de los Clérigos Regulares Pobres
de las Madre de Dios de las Escuelas Pías y la Sociedad del Divino Salvador;
por último la de origen Antioqueño, el Instituto de Misiones Extranjeras.
Como se vio en la conferencia de Patricia Castro el mayor número de
comunidades femeninas proceden de Francia, mientras que en el caso de las
masculinas en su mayoría son de España.
Para
1950 Antioquia ocupaba el tercer lugar en Colombia con el mayor número de
comunidades de religiosos, luego de Cundinamarca y Cauca, mientras que en el
caso de la femeninas Antioquia ocupa el primer lugar en 1940.
La
principal actividad a la que se dedican estas comunidades es la enseñanza y
la administración de parroquias, de las doce once tienen colegios, escuelas o
institutos, y once, también tienen a cargo parroquias, a continuación están
las misiones con cinco comunidades dedicadas a esto y por último se encuentra
la beneficencia o asistencia social a la que se dedican sólo dos, a
diferencia de las femeninas que es en esta actividad donde realizan su
mayor esfuerzo.
La
mayor concentración de comunidades se da en Medellín, donde 9 tiene casa,
iglesia, parroquia, convento o colegio, le sigue Jericó donde encontramos
cuatro con colegio, parroquia, casa, convento y seminario, mientras que en
Santa Rosa existen tres, para el resto del departamento hay una o dos en cada
población. Visto por división eclesiástica (arquidiócesis, diócesis y
prefectura) la lectura arroja otros datos, en la Arquidiócesis de Medellín
se asentaron 11 de los doce comunidades, la diócesis de Santa Rosa tiene
cinco (tres con casa, dos que hicieron misiones), la Diócesis de Antioquia
registra religiosos (Eudistas) sólo hasta 1915, posteriormente se instalan
los carmelitas descalzos en su jurisdicción, la Diócesis de Jericó alcanzó
a tener tres casas de religiosos y una comunidad que incursionó realizando
misiones, por último la Prefectura Apostólica de Urabá contó con una
comunidad en su territorio desde su creación hasta su desaparición
(1918-1941), con anterioridad dos comunidades (jesuitas y claretianos) habían
hecho misiones en la región.(Tabla II)
Los
Hermanos Cristianos en la educación
En
1680, Juan Bautista de la Salle fundó la congregación de Hermanos de la
Escuelas Cristianas. Sus miembros estaban ligados por votos pero no eran
sacerdotes, este tipo de vínculo les permitía dedicarse por completo al
carisma propuesto por la Salle a la comunidad: la enseñanza.
Lo
novedoso de la propuesta lasallista fue modificar la educación, hasta ese
momento dictada en latín. Se comenzó a usar la legua vernácula y además
impartió una educación personalizada. Cada hermano realizaba una tutoría
individual a los alumnos.
Los
Hermanos Cristianos se proponían educar a la clases populares, con una
educación adecuada las necesidades del desarrollo en los países donde
trabajan, basada en principios religiosos y una formación comercial,
industrial, tecnológica y agrícola.
La
labor pedagógica de los hermanos cristianos se extendió por todo el mundo. A
Colombia llegaron en 1875, a Pasto, pero por la oposición del gobierno de César
Conto, Presidente del Estado del Cauca y la guerra de 1876 la comunidad sólo
duró un año en el país. El regreso definitivo de los Hermanos Cristianos es
1890, cuando llegan a Antioquia.
Su
presencia en el Departamento, sostiene Vicent Farrell, fue para competir con
la forma tradicional de la educación que impartían los jesuitas. Su
propuesta era formar un bachiller moderno o un bachiller en ciencias, en esa
época una novedosa alternativa para la educación.
Entre
1890 y 1945 los Hermanos Cristianos fundaron en Medellín dos colegios de enseñanza
secundaria, cuatro escuelas gratuitas de enseñanza primaria y un centro de
formación técnica. En el resto del departamento, desde 1892 hasta 1943, los
hermanos fundaron doce colegios, diez para la educación secundaria y dos de
formación religiosa. Se encontraban ubicados al oriente con tres colegios, al
suroeste con dos, al nordeste tres y al centro con cuatro. Para dos
municipios, Sonsón y La Ceja existen registros de que además de secundaria
impartían educación primaria.
El
período de mayor crecimiento y expansión por
Antioquia comienza en 1892 y avanza hasta 1928 , con ocho fundaciones,
posterior a 1930 las fundaciones se redujeron solamente a cuatro. Sin embargo,
llama la atención que en plena república liberal la comunidad haya fundado o
dirigido tres colegios -en Andes, Bello y La Estrella- cuando por las reformas
educativos de este período la mayor parte de los establecimientos dirigidos
por religiosos pasaron a manos del Estado. (Tablas III y IV)
No
sólo educaron a la clase alta y la clase media, la educación primaria era
gratuita y cubría un buen sector de la población de bajos recursos. Como
también se ofrecían becas a los alumnos más sobresalientes de las escuelas
gratuitas, para continuar estudios en sus colegios.
Colegio
de San José de Medellín
"...el Colegio de San José
se esfuerza por dar a los jóvenes tanto una Educación humana integral, eso
es, física, intelectual, moral, social, y religiosa, como la enseñanza de
las ciencias, de las letras y de la filosofía, cumpliendo ampliamente los
Programas de ambos bachilleratos, mediante una organización, metódica
moderna, y acomodada a las necesidades peculiares de Antioquia."
Los
alumnos del colegio San José de Medellín para obtener el título de
bachiller debían cursar las siguientes materias: 1) religión, siguiendo el
catecismo del padre Astete, curso de religión por el P. Polidori, S.J.,
historia de la Iglesia y apologética cristiana, curso de moral; 2) lengua
materna, que comprendía gramática, lectura, declamación, análisis y
ejercicios de composición ortográfica con aplicación y estudio de raíces
latinas y griegas; 3) en literatura se veía: elocución, retórica y poética,
con los correspondientes ejercicios de análisis, composición y crítica,
historia literaria y filosofía del castellano; 4) filosofía contemplaba, lógica
(dialéctica, criteriología, método), metafísica general y particular
(teodicea, cosmología y sicología) ética y derecho natural; 5) en ciencias naturales, historia natural, fisiología, anatomía
e higiene, botánica, geología y mineralogía; 6) En matemáticas: aritmética
analítica y comercial, álgebra, geometría plana y del espacio, cosmografía,
trigonometría rectilínea, agrimensura y nivelación, levantamiento de
planos; 7) latín: gramática y ejercicios de composición, análisis de
autores clásicos; 8) francés e inglés: ejercicios de elocución, gramática
y redacción; 9) historia: universal y especial historia de Colombia, historia
de literaria e historia de la Iglesia; 10) comercio: contabilidad y tenencia
de libros, derecho mercantil, correspondencia comercial en tres idiomas
(castellano, inglés y francés), taquigrafía y mecanografía. Además se
dictaban los siguientes cursos complementarios como: dibujo técnico y de
adorno, música, solfeo y canto, obligatorio tres veces por semana. Esta clase
al igual que la de mecanografía se pagaban por separado. Se dictaban
conferencias de urbanidad, higiene, derecho usual y sociología de una a tres
veces por semana.
Los
estímulos que se usaban en el colegio eran los que se utilizaban en los
mejores colegios del mundo, según los Hermanos. Estos estímulos tendían a
formar la buena conducta y el carácter, impulsar el trabajo, adquirir maneras
cultas, signos del caballero cristiano.
Los
padres de familia eran informados del desempeño de sus hijos mediante una
libreta semanal, donde se explicaban detalladamente calificaciones, trabajo,
urbanidad y conducta. Estos conceptos se tenían en cuenta para las
calificaciones de fin de año. Además había cuadros de honor, proclamaciones
semanales y mensuales y varias clases de premios. La buena conducta eran
esenciales para las Hermanos de las Escuelas Cristianas, de ahí que vigilaran
el modo de manejarse del alumno como estudiante y el respeto a los superiores,
la puntualidad a la entrada, el silencio y orden en la clase, filas, capillas,
y en especial en los dormitorios, actividad en recreos y atención a las
explicaciones. Por otro lado, se fomentaba la aplicación al trabajo, es decir
la dedicación para estudiar para los exámenes y cumplir con las tareas.
"Esta
se refiere a la formación de los modales propios de una persona bien nacida y
educada con todo el esmero de un caballero cristiano, y exige: buena postura,
lenguaje correcto; esmerado aseo, tanto en la persona como en el vestido;
trato comedido respetuoso y amable; orden y método para el trabajo; en una
palabra abstención de todo cuanto pueda mortificar a nuestros semejantes, y
práctica de todo lo que puede complacerlos."
Los
Hermanos Cristianos enfocaban su educación a las necesidades para el
desarrollo del país. En el colegio que estos administraban se ofrecían
grados en `bachiller moderno' o `bachiller en ciencias', novedosas
alternativas en la educación en Colombia. De esta forma lograra competir con
la educación tradicional que impartían los jesuitas.
La
educación física era necesaria para conservar la salud y desarrollar el
cuerpo, de tal forma que el alma encuentre
instrumento para hacer el ejercicio de sus facultades. Para esto los alumnos
debían tener precauciones higiénicas, recreos entre clases, donde alumnos y
maestros realizaban los juegos de su elección, y lecciones de gimnasia,
calisténica, ejercicios de sport, paseos y natación.
Merece
mencionarse las diferentes asociaciones académicas que los hermanos fundaron
en el colegio: la Academia Anglo-francesa dedicada a desarrollar el estudio y
la práctica del inglés y el francés, materias obligatorias en el colegio, y
lenguas de mucha utilidad en Medellín, un dinámico centro comercial e
industrial, a donde confluía buena parte del café que exportaba el país y
la Academia Cuervo que se dedicaba al estudio de la literatura y la filosofía,
donde los alumnos practicaban declamación y oratoria
Museo
de Historia Natural
Fundado
por el Hermano Nicéforo María en 1913, quien lo dirigió hasta 1922. En
estos nueve años el hermano logró crear las colecciones de ornitología,
herpetología, batracología, entomología, etnología, paleontología,
mineralogía y botánica.
Las
muestras del Museo crecieron a punto de donaciones, como la que hizo Ricardo
Restrepo Wills, en mayo de 1918, el obsequió un venado de su finca `La Clara'
que se encontraba en Angelópolis. Las personas que desearan enviar algo lo
podían hacer, pues el museo contaba con franquicia postal. Las horas de
apertura al público eran de los domingos de 12 m. a 4 p.m.
Los
Hermanos comenzaron la colección sistemática de las aves de Antioquia en
1910. Crearon una colección muy completa de los pájaros de Medellín y
regiones circunvecinas. Luego la colección se enriqueció con ejemplares de
tierra fría y caliente.
En
noviembre de 1914 el museo recibió la visita de E. Miller y Mowarth Boyle
enviados por el Museo de Historia Natural de Nueva YorK. Ellos visitaron
Puerto Valdivia, Peque, Paramillo, Dabeiba, Buriticá, Alto Bonito, Santa
Elena y Puerto Berrío.
Misiones:
Los Carmelitas Descalzos y los Padres Javieres
Para
la segunda mitad del siglo XIX las misiones de evangelización católica tiene
un gran resurgimiento. Pio IX mostraba un especial interés por extender las
misiones latinoamericanas.
En
el contexto latinoamericano se ve una temprana llegada de misioneros, en países
como Bolivia, Perú, Chile, Argentina se crean misiones desde la década de
1850. En el caso de México y Colombia los misioneros se retrasaron bastante
en llegar, a México llegan a principios del siglo XX y a Colombia los
misioneros llegan en la última década del siglo XIX.
En los artículos 25 y 31, del Concordato se encuentran las bases para
el desarrollo de las misiones en el país.
Desde este se momento aparece la creación de Vicariatos y Prefecturas Apostólicas
en todo el país, entre 1893 y 1949 se crean 14, siendo su período de mayor
auge las décadas del 10 y del 20 donde se instauran 7 la mitad de las creadas
en todo el período.
En
Antioquia los jesuitas, los franciscanos y los claretianos habían realizado
correrías por el nordeste, suroeste y Urabá desde inicios del siglo XX. Pero
es a partir de 1918 cuando se crea la Prefectura Apostólica de Urabá que se
instaura las misiones bajo la Congregación de Propaganda Fide
con la llegada de los Carmelitas Descalzos a esta Prefectura.
Esta
comunidad de origen Español fue fundada por Santa Teresa de Jesús en 1568,
había llegado al país en 1911 a Villa de Leyva, al departamento de Antioquia
habían ingresado en 1914 (Sonsón y Frontino) y luego a Medellín en 1920.
Cuando
llegaron a administrar la Prefectura Apostólica de Urabá
encontraron en la región a las Hermanas de la Madre Laura, comunidad
de origen local que había desarrollado una extensa labor en la región.
Aunque
poco divulgado, bajo los Carmelitas Descalzos en Urabá se llevaron a cabo
varias labores importantes como la apertura de caminos, el desarrollo de obras
de infraestructura (acueducto y electricidad). Por discrepancias
con las lauritas y ante su salida trajeron de España a sus las
Carmelitas Misioneras.
Cuando
se habla de misiones como actividad, se trata de las correrías que realizaban
los religiosos por la jurisdicción de la Prefectura. En estas realizaban
bautizos, matrimonios, impartían doctrina, celebraban misas, hacían
procesiones en honor a la virgen del Carmen. Cada una de estas actividades
pretendían extender la civilización occidental a zonas alejadas y de dificil
acceso, y así incorporar estas zonas al país.(Tabla V)
La
otra comunidad misionera, fundada en Antioquia, ve sus orígenes en la
Conferencia Episcopal celebrada en Bogotá en 1924, esta convocó a los
obispos del país a trabajar según los deseos del papa Pío XI de establecer
seminarios de misiones. Por recomendación del provincial de los Eudistas,
Maturín Jehano, el obispo antioqueño Miguel Ángel Builes se da a la tarea
de conseguir los permisos necesarios ante las autoridades competentes para
llevar a cabo su fundación. En 1927 el obispo Builes recibió de la
Nunciatura Apostólica la autorización para establecer el seminario. La
ciudad elegida para la nueva fundación fue Yarumal, la congregación fue
creada la conversión de infieles, impartir catequesis a los `salvajes' y
fundar misiones rurales. Pero monseñor Builes no sólo fundó misioneros,
también creó la comunidad de Teresita Misioneras.
Sorprende
que en tan sólo 23 de años (1927-1930) la comunidad de los padres Javieres
ya habían incursionado en 27 poblaciones del país, ubicadas en 8
jurisdicciones eclesiásticas (Tabla VI). Para los primeros años de la década
de 1970, además de Colombia, estaban en Bolivia, Ecuador y Venezuela. Antes
de terminar la década de los 90 ya habían llegado a Angola, Kenya, Panamá,
Brasil, Perú, Malí y Costa de Marfil para un total de 11 países con casas
de padres javieres.
Fuentes
La
revisión de la bibliografía fue una sorpresa, no se contaba con una producción
tan vasta de textos sobre la comunidades masculinas, a diferencia de las de
religiosas donde los casos no son tantos.
Dos terceras partes de los trabajos han sido realizados por los
religiosos, o por laicos vinculados de una u otra forma con la Iglesia o con
los religiosos. Un menor número es fruto del trabajo de historiadores
profesionales. En el caso colombiano, la Compañía de Jesús y los Hermanos
de la Escuelas Cristianas ha producido el mayor número de estudios, seguida
por los franciscanos, los carmelitas, los claretianos y los domínicos.
La
mayoría de los trabajos tienen un tono de exaltación y glorificación
y narran de forma lineal los acontecimientos más sobresalientes en la
vida de la comunidad. Pocos trabajos se inspiran en las nuevas corrientes
historiográficas.
Sin
embargo, dentro de este material no puede dejar de mencionarse algunos nombres
que por la rigurosidad en la elaboración de sus trabajos, entre estos están:
los de los jesuitas Rafael Pérez, Luis J. Muñoz y Juan Manuel Pacheco (con
La Historia de los Jesuitas en Colombia y los tomos que alcanzó
a escribir para la Historia Extensa de Colombia), el salesiano José J.
Ortega Torres, el franciscano Gregorio Arcila, y el padre carmelita Severino
de Santa Teresa con la Historia documentada de la Iglesia en Urabá y el
Darién. Dentro de los historiadores profesionales debe destacarse a
Vincent Farrell con su tesis doctoral "The Catolic Church and Colombian
Education: 1886-1930 in Search of a Tradition"
aquí analiza las pugnas entre la Iglesia y el Estado, el control en la
educación en aquella época, y observar el desarrollo a corto y largo plazo
del sistema educativo colombiano.
Las
fuentes primarias de archivos ofrecen cierta dificultad a la hora de ser
consultadas, el undo fue un poco limitado, el estado de estos (deterioro,
fragmentado, sin clasificación), la reserva que posee cada comunidad sobre
información, y que la comunidad enviaba los registros a la capital de la
provincia a la que pertenecía o directamente a Roma a la casa general no
cuidando de dejar copia en la sede de su casa, fueron las causas para que se
uso no fuera todo lo profundo que se deseaba. No obstante se tuvo acceso a
algunos fondos de los Archivos de los Hermanos Maristas, Hermanos Cristianos,
Carmelitas, Salvatorianos, Escolapios, Salesianos, Claretianos, Jesuitas; que
por lo pobres en información más que aportar datos nuevos sirvieron para
corroborar los datos obtenidos en la fuentes secundarias y otras primarias. En
conclusión esta por realizarse un trabajo que de cuenta real sobre el estado
de los archivos de la comunidades religiosas, no sólo de Antioquia sino del
país en general.
En
cuanto a las publicaciones periódicas, se evidenció que casi todas las
comunidades o alguna de sus obras (colegios, universidades, misiones,
asociaciones devotas) contaba con una publicación para informar a la sociedad
el estado, avance o actividades desarrolladas. Vale la pena resaltar las
siguientes (Tabla VII)
Además
de las comunidades que publican sus periódicos oficiales; se presentaron
algunos grupos laicos que instituyeron medios de información de acuerdo a la
comunidad con la que se desarrolla su trabajo de cristianos consagrados.
Un
gran soporte para esta investigación fueron los anuarios eclesiásticos, la
sistematización de la información permitieron revaluar varias datos que
hasta la fecha no habían sido mirados.
Tabla
I
Fecha de establecimiento de las
comunidades de religiosos en
Antioquia y en Colombia, 1884-1950
|
Comunidad
|
Antioquia
|
Colombia
|
1
|
Jesuitas
|
1885
|
1884
|
2
|
Eudistas
|
1888
|
1883
|
3
|
Hermanos
Cristianos
|
1890
|
1890
|
4
|
Salesianos
|
1890
|
1912
|
5
|
Franciscanos
|
1895
|
1895
|
6
|
Claretianos
|
1913
|
1909
|
7
|
Carmelitas
Descalzos
|
1914
|
1911
|
8
|
Padres
Javieres o Misioneros de Yarumal
|
1927
|
1927
|
9
|
Agustinos
Recoletos
|
1929
|
1889
|
10
|
Salvatorianos
|
1942
|
1899
|
11
|
Terciarios
Capuchinos
|
1948
|
1928
|
12
|
Escolapios
|
1950
|
1947
|
Fuentes:
Díez Suárez,
Bernardo, S.J., Los religiosos en Colombia. 500 años sembrando luz y amor,
Medellín, Litográficas Calidad Ltda., 1993., Londoño, Patricia, “Aspects
of Religion. Culture and Sociability in Antioquia (Colombia), 1850-1930”,
tesis doctoral, Universidad de Oxford, 1997., Agustinos: Ayape de San
Agustín, Eugenio, fray, Fundaciones y noticias de Nuestra Señora de la
Candelaria de la orden de Agustinos Recoletos, tomo I, Bogotá, Editorial.
Lumen Christi, 1950., Capuchinos: Alborada. Número
extraordinario dedicado a la conmemoración de las Bodas de Diamante de la
Congregación de Religiosos Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los
Dolores, Medellín, s.e., s.f., Carmelitas: Restrepo Giraldo, Bernardo,
O.C.D., La Orden Carmelitana en Colombia. Síntesis histórica, texto de
formación Carmelitana, No. 7. Bogotá, Ed. L. Canal, 1979., Compañía
de Jesús: Muñoz, Luis J.,
S.J., Notas históricas sobre la Compañía de Jesús restablecida en
Colombia y Centro América, Oña, Imprenta del Colegio, 1920., Pérez,
Rafael. S.J., La Compañía de Jesús en Colombia y Centro América,
Valladolid, Imprenta, librería, Heliografía y Talleres de Grabado de Luis N.
Gaviria, 1896., Claretianos: Nebreda, Eleuterio, C.M.F., y Carlos E.
Mesa, C.M.F., Los claretianos en Colombia, Medellín, L. Vieco e hijas,
1981., , Eudistas: Samson, Luis y Arturo Echeverri, Los eudistas en
suramérica, 2tomos , Bogotá, Editorial Carrera 7a., 1981 y 1982., Javieres:
López, Manuel Antonio, m.x.y., Apuntes para la historia del
seminario de Yarumal, [Bogotá], Ediciones Etnia, [1978]., Salesianos:
Ortega Torres, José J, La
obra salesiana en Colombia, los primeros cincuenta años: 1890-1940, Bogotá,
Escuelas Gráficas salesianas, 1941, 2 tomos., Salvatorianos: Kielbasa,
Antoni, SDS., Raíces comunes.
Salvatorianos y Salvatorianas, Navarra, Salvatorianos, 1987. Escolapios:
Alonso Marañón, Pedro Manuel, La Iglesia docente en el siglo XIX.
Escuelas Pías en España y América. Formación del profesorado y expansión
educativa, Alcalá de Henares, Servicio de Publicaciones Universidad de
Alcalá de Henares, 1996.
Tabla
II
Conjunto de actividades desempeñadas
por los religiosos en Antioquia, 1885-1950
Comunidad
|
Actividades
|
Lugares
|
Número total
localidades
|
Carmelitas
Descalzos
|
Parroquias,
misiones, enseñanza
|
Apartadó,
Arboletes, Chigorodó, Dabeiba, Fontidueño, Frontino, Juntas de
Uramita, Medellín, Murrí, Murindó, Necoclí, Pavarandocito, Río
Grande, San José de Turbo, San Juan de Urabá, Sonsón, Turbo, Urama,
Vigía del Fuerte.
|
18
|
Hermanos
Cristianos
|
Enseñanza,
beneficencia
|
Andes,
Bello, Copacabana, Jericó, La Ceja, La Estrella, Marinilla, Medellín, San Antonio de Prado, San Pedro,
Santa Rosa, Sonsón, Yarumal.
|
13
|
Claretianos
|
Enseñanza,
parroquias, misiones
|
Bolívar,
Jericó, Medellín, Murindó Puerto Berrío, Santo Domingo, Urabá,
Turbo.
|
7
|
Franciscanos
|
Parroquias,
enseñanza, misiones
|
Angelópolis,
Jericó, Medellín, Nordeste antioqueño, Occidente de Antioquia, Santo
Domingo, Remedios, Yalí.
|
6
|
Jesuitas
|
Enseñanza,
parroquias, misiones
|
Amagá,
Medellín, Remedios, Santo Domingo, Santa Rosa, Urabá.
|
5
|
Eudistas
|
Enseñanza,
parroquias
|
Jericó,
Medellín, Santa Fe de Antioquia, Santa Rosa, San Pedro.
|
5
|
Salesianos
|
Parroquias,
enseñanza, beneficencia
|
La
Ceja , Medellín
|
2
|
Padres
Javieres o Misioneros de Yarumal
|
Misiones,
enseñanza, parroquias
|
Yarumal,
Yondó
|
2
|
Salvatorianos
|
Enseñanza,
parroquias
|
Granada,
La Estrella
|
2
|
Agustinos
Recoletos
|
Parroquias
|
Medellín
|
1
|
Terciarios
Capuchinos
|
Enseñanza,
parroquias
|
La
Estrella
|
1
|
Escolapios
|
Enseñanza,
parroquias
|
Medellín
|
1
|
Fuentes:
Anuario de la Iglesia Católica en Colombia,
Bogotá, Ed. Pax, 1951, Anuario de la Iglesia Católica en Colombia,
Bogotá, Pontifica Universidad Javeriana, 1938, Anuario Eclesiástico,
1919-1920, Barcelona, Editorial Subirina, 1920, Anuario Eclesiástico de la
República de Colombia, Bogotá, Editorial El Catolicismo, 1927,
Conferencia de superiores mayores de religiosos, Directorio de comunidades
religiosas en Colombia, Bogotá, Italgraf, s.f.
Tabla
III
Educación
lasallista en Medellín, 1890-1945
Fecha
apertura
|
Institución
|
Ubicación
|
Nivel educativo
|
1890
|
Colegio
de San José
|
Centro
|
Secundaria
|
1891
|
Escuela
San Juan Bautista de la Salle
|
Centro
|
Primaria
|
1909
|
Escuela
del Sagrado Corazón de Jesús
|
Sector de Tenerife
|
Primaria
|
1926
|
Talleres
de la Plaza de Flórez
|
Plaza de Flórez
|
Técnica
|
1932
|
Escuela
del Beato Salomón
|
El Morro, barrio Bostón
|
Primaria
|
1938
|
Colegio
San Carlos
|
Cerca al templo de Jesús Nazareno
|
Secundaria
|
1945
|
Escuela
Ozanam
|
Barrio Gerona
|
Primaria
|
Fuentes:
Anuario
de la Iglesia Católica en Colombia,
Bogotá, Pontifica Universidad Javeriana, 1938, Anuario Eclesiástico,
1919-1920, Barcelona, Editorial Subirina, 1920, Anuario Eclesiástico de la
República de Colombia, Bogotá, Editorial El Catolicismo, 1927, Archivo
Fotográfico Benjamín de la Cale, Farrell, Robert Vincent, "The Catolic
Church and Colombian Education: 1886-1930: in Search of a Tradition",
tesis Ph.D., Columbia University,
Nueva YorK, 1974.. Anuario de la Iglesia Católica en Colombia,
Bogotá, Ed. Pax, 1951, Conferencia de superiores mayores de religiosos, Directorio
de comunidades religiosas en Colombia, Bogotá, Italgraf, s.f., Instituto
de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, In memoriam 1890-1940. Bodas de
oro de la llegada de los Hermanos de las EE. Cristianas a Colombia y de la
fundación del Colegio de San José de Medellín, Medellín, Ed. Bedout,
[1940], Hermano Florencio Rafael y Hermano Andrés Bernardo, Los Hermanos
de la Salle en Colombia. Bodas de diamante, 1890-1965, Medellín, Ed.
Bedout, 1965., Hermano Florencio Rafael y Hermano Andrés Bernardo, Los
Hermanos de la Salle en Colombia. Bodas de diamante, 1890-1965, Medellín,
Ed. Bedout, 1965., Hermano Justo Ramón, "La trayectoria lasallista en
Colombia", en: Revista de la Academia de Historia Eclesiástica
vol, IV, # 13, Bogotá, enero-abril, 1969, pp. 31-50.
Tabla IV
Educación
lasallistas en los municipios antioqueños, 1892-1950
Fecha
apertura
|
Institución
|
MUNICIPIO
|
Nivel educativo
|
1892
|
Colegio
San José
|
Marinilla
|
Secundaria
|
1901
|
Colegio
Gregorio Gutiérrez González
|
La
Ceja
|
Secundaria,
Primaria
|
1905
|
Colegio
de San José
|
Sonsón
|
Secundaria
|
1907
|
Colegio
de San José
|
Jericó
|
Secundaria
|
1908
|
Colegio
de San Juan Bautista de la Salle
|
Copacabana
|
Secundaria
|
1911
|
Colegio
de San Luis
|
Yarumal
|
Secundaria
|
1916
|
Instituto
del Norte
|
Santa
Rosa de Osos
|
Secundaria
|
1928
|
Noviciado
|
San
Pedro
|
Religiosa
|
1932
|
Colegio
San Luis
|
Andes
|
Secundaria
|
1937
|
Instituto
Manuel José Cayzedo
|
Bello
|
Secundaria
|
1942
|
Colegio
de San José
|
La
Estrella
|
Secundaria
|
1943
|
Noviciado
menor y Escolasticado
|
San
Antonio de Prado
|
Religiosa
|
Fuentes:
Anuario de la Iglesia Católica
en Colombia, Bogotá,
Ed. Pax, 1951, Anuario de la Iglesia Católica en Colombia, Bogotá,
Pontifica Universidad Javeriana, 1938, Anuario Eclesiástico,
1919-1920, Barcelona, Editorial Subirina, 1920, Anuario Eclesiástico de la
República de Colombia, Bogotá, Editorial El Catolicismo, 1927, Archivo Fotográfico Benjamín de la Cale, Farrell, Robert Vincent,
"The Catolic Church and Colombian Education: 1886-1930: in Search of a
Tradition", tesis Ph.D.,
Columbia University, Nueva YorK, 1974., Conferencia de superiores
mayores de religiosos, Directorio de comunidades religiosas en Colombia,
Bogotá, Italgraf, s.f., Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, In memoriam
1890-1940. Bodas de oro de la llegada de los Hermanos de las EE. Cristianas a
Colombia y de la fundación del Colegio de San José de Medellín, Medellín,
Ed. Bedout, [1940], Hermano Florencio Rafael y Hermano Andrés Bernardo, Los
Hermanos de la Salle en Colombia. Bodas de diamante, 1890-1965, Medellín,
Ed. Bedout, 1965. Hermano Florencio Rafael y Hermano Andrés Bernardo, Los
Hermanos de la Salle en Colombia. Bodas de diamante, 1890-1965, Medellín,
Ed. Bedout, 1965., Hermano Justo Ramón, "La trayectoria lasallista en
Colombia", en: Revista de la Academia de Historia Eclesiástica
vol, IV, # 13, Bogotá, enero-abril, 1969, pp. 31-50.
Tabla
V
Labor de los misioneros Carmelitas
Descalzos en Antioquia, 1914-1950
Fecha
de inicio
|
Lugar
|
Actividad
|
1914
|
Frontino
|
parroquia,
Prefectura Apostólica, casa de misioneros
|
1914
|
Sonsón
|
parroquia,
convento, colegio
|
1919
|
Dabeiba
|
parroquia,
casa misional, planta eléctrica
|
1919
|
San
José de Urama
|
parroquia,
casa misional, acueducto, planta eléctrica
|
1920
|
Medellín
|
parroquia,
iglesia, convento
|
1921
|
Pavarandocito
|
parroquia,
casa misional
|
1921
|
Turbo
|
parroquia,
casa misional, hospital
|
1922
|
Puerto
César
|
Misiones
|
1923
|
Arboletes
|
Misiones
|
1924
|
Juntas
de Uramita
|
parroquia,
casa misional, acueducto
|
1924
|
Murrí
|
Misiones
|
Ca- 1927 1941
|
Murindó
|
parroquia,
casa misional
|
Ca- 1927
1941
|
Necloclí
|
Iglesia,
casa misional
|
Ca- 1927
1941
|
Chigorodó
|
iglesia,
casa misional
|
Ca- 1927
1941
|
San
Juan de Urabá
|
parroquia,
casa misional
|
Ca- 1927
1941
|
Vigía
del Fuerte
|
Iglesia
|
|
|
|
ca-
1927 1941 ca- 1941
|
Apartadó
|
iglesia,
casa misional
|
1934
|
San
José de Turbo
|
internado
indígena, iglesia, casa misional, talleres de artes y oficios
|
1942
|
Río
Grande
|
Concentración
escolar
|
1944
|
Fontidueño
|
dirección
de la Casa de Menores
|
Fuentes:
Alma, número extraordinario, publicado por las
religiosas de María Inmaculada y Santa Catalina de Sena, Anuario de la
Iglesia Católica en Colombia, Bogotá, Pontifica Universidad Javeriana,
1938, Anuario Eclesiástico, 1919-1920, Barcelona, Editorial Subirina,
1920, Anuario Eclesiástico de la República de Colombia, Bogotá,
Editorial El Catolicismo, 1927, Conferencia de superiores mayores de
religiosos, Directorio de comunidades religiosas en Colombia, Bogotá,
Italgraf, s.f., Severino de Santa Teresa, O.C.D., Historia documentada de
la Iglesia en Urabá y el Darién. Desde el descubrimiento hasta Nuestros días,
volumen V, tercera parte, Bogotá, Kelly, 1957 y Vírgenes conquistadoras
que Santa Teresa envió a las Américas, Vitoria, Ediciones El Carmen,
1951., Revista de Misiones, Bogotá, 1925-1934., Restrepo Giraldo, Bernardo,
O.C.D., La Orden Carmelitana en Colombia. Síntesis histórica,
texto de formación carmelitana, No. 7. Bogotá,
L. Canal, 1979, La
Orden Carmelitana en Colombia 1911 «julio 5» 1981. Bogotá, El Greco,
[1981] y Setenta y cinco años de la Orden Carmelitana en Colombia,
1911-1986, Bogotá, Editorial Época, [1986], Gaviria Pérez, Nicolás, Misioneros
claretianos en el Chocó, Medellín, L. Vieco e hijas, 1980.
Tabla
VI
Labor
misionera de los Padres Javieres en
Colombia, 1927-1950
Fecha de
inicio
|
Lugar
|
Jurisdicción eclesiástica
|
Actividad
|
1927
|
Yarumal
(Antioquia)
|
Diócesis
de Santa Rosa de Osos
|
Seminario,
parroquias, misiones
|
1938
|
Simití
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones
|
1939
|
San
Martín de Loba
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones
|
1940
|
Lorica
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones, colegio
|
1940
|
Purísima
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones
|
1940
|
Sabanalarga
(Atlántico)
|
Diócesis
de Barranquilla
|
Parroquias,
misiones
|
1940
|
El
Banco
(Magdalena)
|
Diócesis
de Santa Marta
|
Parroquias,
misiones
|
1940
|
Barranquilla
(Atlántico)
|
Diócesis
de Barranquilla
|
Parroquias,
misiones
|
1943
|
Pinillos
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones
|
1945
|
Santa
Ana
(Magdalena
|
Diócesis
de Santa Marta
|
Parroquias,
misiones
|
1945
|
Labateca
(Santander)
|
Prefectura
Apóstlica de Labateca
|
Dirección
Prefectura Apostólica, parroquias, misiones
|
1945
|
Santa
Librada
(Santander)
|
Prefectura
Apóstlica de Labateca
|
Misiones,
internado indígena (lauritas)
|
1945
|
Río
Viejo
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Misiones
|
1946
|
Guamal(Magdalena)
|
Diócesis
de Santa Marta
|
Parroquias,
misiones
|
|
|
|
|
1946
|
Yondó
(Antioquia)
|
Diócesis
de Santa Rosa de Osos
|
Parroquias,
misiones
|
1947
|
Bocota
(Santander)
|
Prefectura
Apóstlica de Labateca
|
Misiones
|
1948
|
Puente
Aranda
(Cundinamarca)
|
Arquidiócesis
de Bogotá
|
Parroquias
|
1948
|
Vélez
(Santander)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Parroquias,
misiones
|
1948
|
Barbosa
(Santander)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Misiones
|
1948
|
Landázuri
(Santander)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Parroquias,
misiones
|
1948
|
Guavatá
(Boyacá)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Parroquias,
misiones
|
1948
|
Cimitarra
(Santander)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Parroquias,
misiones
|
1948
|
Chucarima
(Santander)
|
Prefectura
Apostólica de Labateca
|
Misiones
|
1948
|
Puerto
Araújo
(Santander)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Misiones
|
1949
|
Galerazamba
(Bolívar)
|
Arquidiócesis
de Cartagena
|
Parroquias,
misiones
|
1949
|
Mitú
(Vaupés)
|
Prefectura
Apostólica de Mitú
|
Dirección
Prefectura Apostólica, parroquias, misiones
|
|
|
|
|
1949
|
Montfort
(Vaupés)
|
Prefectura
Apostólica de Mitú
|
Misiones
|
1950
|
Güepsa
(Arauca)
|
Diócesis
de Socorro-San Gil
|
Parroquias,
Misiones
|
Fuentes:
Anuario
Eclesiástico,
1919-1920, Barcelona, Editorial Subirina, 1920, Anuario de la Iglesia Católica
en Colombia, Bogotá, Pontifica Universidad Javeriana, 1938, Anuario
Eclesiástico de la República de Colombia, Bogotá, Editorial El
Catolicismo, 1927, Conferencia de superiores mayores de religiosos, Directorio
de comunidades religiosas en Colombia, Bogotá, Italgraf, s.f.,
Instituto de misiones extranjeras de Yarumal, IMEY. Los 63 años de su
historia, Medellín, Editorial
Piloto, 1990., Severino de Santa Teresa, O.C.D., Historia documentada de la
Iglesia en Urabá y el Darién. Desde el descubrimiento hasta Nuestros dias,
volumen V, tercera parte, Bogotá, Kelly, 1957.
Tabla
VII
Revistas
y periódicos editados por las comunidades de religiosos en Antioquia,
1906-1950
Comunidad
|
Título
|
Fecha
|
Vocero de
|
Lugar de publicación
|
Jesuitas
|
Los
Estudios
|
1911
-
|
Colegio San Ignacio
|
Medellín
|
Jesuitas
|
Juventud
Ignaciana
|
1934
-
|
Colegio San Ignacio
|
Medellín
|
Jesuitas
|
La
Familia Cristiana
|
1906
|
Apostolado de la Oración (asociación
laica)
|
Medellín
|
Jesuitas
|
Antioquia
por María
|
1920
-
|
Congregación de Jóvenes de la
Inmaculada Concepción y Congregaciones Marianas de la Catedral
(asociación laica)
|
Medellín
|
Hermanos
Cristianos
|
Boletín
del Colegio de San José
|
1919
–2000
|
Colegio de San José de Medellín
|
Medellín
|
Hermanos
Cristianos
|
Boletín
del Colegio San de José
|
1919
-
|
Colegio de San José de Sonsón
|
Sonsón
|
Hermanos Cristianos
|
El
Boletín del Centro Arboleda
|
1919
-
|
Centro Arboleda
(asociación
laica)
|
Sonsón
|
Franciscanos
|
La
Buena Prensa
|
1912
-
|
Orden Tercera (asocicación laica)
|
Medellín
|
Franciscanos
|
Estudios
|
1944?
-
|
Instituto Cristóbal Colón
|
Medellín
|
Carmelitas
|
Luz
Católica
|
1927
– 1941
|
Organo oficial de la Prefectura Apostólica
de Urabá
|
Frontino
|
Carmelitas
|
El
Carmen
|
1945
-
|
____________
|
Medellín
|
Padres
Javieres
|
El
Misionero
|
1934
-
|
Seminario de Misiones
|
Yarumal
|
Padres
Javieres
|
Revista
de Misiones
|
ca.1934
- 2000
|
Seminario de Misiones
|
Yarumal
|
Salesianos
|
Lábaro
|
1937
-
|
Instituto Pedro Justo Berrío
|
Medellín
|
Salvatorianos
|
Juventud
Salvatorianaca.
|
|
____________
|
La Estrella
|
Salvatorianos
|
Voz
del salvador
|
ca.1945
-
|
____________
|
La Estrella
|
Terciarios
capuchinos
|
El
Sembrador
|
ca.1945
-
|
_____________
|
La Estrella
|
Eudista
|
El
Recreo
|
1894
-
|
|
Santa Fe de Antioquia
|
Georges
Duby, La época de las catedrales. Arte y sociedad, 980-1420,
Madrid, Ediciones Cátedra, 1993. p. 138
El
sacrosanto y ecuménico Concilio de Trento,
traducción de Ignacio López de Ayala, París, Librería de Rosa, Bouret
y Cía, 1853, pp.367-319, El
código de derecho canónico, traducido y comentado por Francisco
Blanco Nájera, Cádiz, Editorial Establecimientos Cerón y Librería
Cervantes, S.L, 1942. p.6. En el canon 488 se define Religión como una
sociedad aprobada por la autoridad eclesiástica, los asociados en arreglo
a las leyes propias de las misma sociedad hacen votos públicos, perpetuos
o temporales que con el tiempo deben ser renovados para tender a la
perfección evangélica. El
código de derecho canónico, p. 334.
Boletín del Colegio San José de Medellín, I, # 1, Medellín,
julio 1919. pp. 2-3.
Boletín del Colegio de San José. s.año, s.n, Medellín,
ca. 1924. pp. 11-15
Boletín
del Colegio de San José.
s.año, s.n, Medellín, ca. 1924. p. 5, Lucía Atehortúa, "El
desarrollo de las ciencias naturales", Historia de Antioquia,
dirigida por Jorge Orlando Melo, Bogotá, Suramericana de Seguros, 1988.
p. 417, Boletín del Colegio de San José, año I, # 1, Medellín, julio
de 1919. p. 32.
Dice el artículo 25:"...El Gobierno de Colombia se obliga a
asignar a perpetuidad una suma anual liquidada que desde luego se fija en
cien mil pesos colombianos y que se aumentará equitativamente cuando
mejore la situación del Tesoro, los cuales se destinarán en la proporción
y términos que se convengan entre
las dos Supremas Potestades, al auxilio de diócesis, cabildo, seminarios,
misiones y otras obras propias de la acción civilizadora de la
Iglesia", y el artículo 31: "Los convenios que se
celebran entre la Santa Sede y el gobierno de Colombia, para el fomento de
las misiones católicas en las tribus bárbaras, no requieren ulterior
aprobación del congreso". Alfredo Vásquez Carrizosa, El
Concordato de Colombia con la Santa Sede, Bogotá, Italgraf, 1973, pp.
138-139, y Severino de Santa Teresa, O.C.D., Historia documentada de la
Iglesia en Urabá y el Darién. Desde el descubrimiento hasta nuestros días,
volumen V, tercera parte, Bogotá, Editorial Kelly, 1957. p. 80.
La Sagrada Congregación Propaganda Fide fue creada por el papa
Gregorio XV en 1622. Era dirigida por un cardenal con el título de
Prefecto. Su finalidad era la de organizar la propagación de la Fe en el
mundo. Tenía autoridad, en donde no existía jerarquía regular, sobre
vicarios y prefectos apostólicos, sobre concilios, clero, seminarios de
misiones, escuelas, obras pías, administración destinados a la misión y
sobre misiones religiosos y no religiosos. Enciclopedia del Católico,
dirigido por Giustino Boson, segunda parte, Barcelona, Seix Barral, S.A,
1951, p. 231.
Arriba
|